Eliminar el gluten de la alimentación no es una moda ni un reto temporal para todos. En México, muchas personas escuchan hablar de dieta sin gluten sin tener claro qué significa ni cuándo es necesaria. El gluten es una proteína presente en el trigo, la cebada y el centeno, así como en todos sus derivados más comunes.
Para ciertas personas, consumir gluten provoca daños en el intestino delgado y altera la absorción de nutrientes. En estos casos, seguir una dieta sin gluten no es una preferencia, sino parte esencial del tratamiento para mantener la salud digestiva y general.
La dieta sin gluten se basa en alimentos naturales que no contienen esta proteína. Entre ellos se encuentran frutas, verduras, carnes, pescados, huevos, leguminosas, arroz, maíz, papas y granos como quinoa o amaranto. Estos alimentos permiten mantener una alimentación variada y completa sin recurrir al trigo u otros cereales con gluten.
A quién va dirigida la dieta sin gluten
La dieta sin gluten está indicada principalmente para personas con enfermedad celíaca. En esta condición, incluso pequeñas cantidades de gluten pueden provocar inflamación intestinal, dolor abdominal, diarrea y deficiencias nutricionales. Por ello, la eliminación del gluten debe ser estricta y permanente.
Además, es importante considerar la presencia de gluten oculto en productos procesados. Salsas, embutidos, sopas en polvo y alimentos empacados pueden contener trigo o derivados como espesantes. Leer etiquetas y verificar que los productos estén certificados sin gluten es una parte clave del cuidado diario.
Seguir esta dieta requiere organización y conocimiento, pero no implica una alimentación limitada. Con ingredientes correctos y planificación, es posible mantener un patrón alimentario equilibrado y suficiente.
Eliminar el gluten sin indicación médica no ofrece beneficios comprobados y puede aumentar el riesgo de deficiencias si no se hace con supervisión profesional.
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