Una bebida casera está conquistando a quienes buscan opciones más saludables en su día a día. Se trata del loaded water, una tendencia que ha ganado espacio en Estados Unidos y que ahora comienza a llamar la atención en países de Latinoamérica como México. Su éxito radica en que convierte el agua común en una opción más completa para hidratarse.
El concepto es sencillo. A una jarra de agua se le agregan frutas frescas, electrolitos o suplementos en polvo con minerales. Así, además de refrescar, esta preparación ofrece nutrientes clave como el potasio, un mineral que ayuda al buen funcionamiento de los músculos y del corazón. En ambientes calurosos, donde el sudor provoca pérdida de sales, esta bebida puede marcar la diferencia.
Beneficios del loaded water
El principal atractivo del loaded water es la posibilidad de personalizarlo según las necesidades de cada persona. Se puede añadir naranja o plátano para incrementar el potasio, pepino para mayor frescura o incluso un toque de limón para potenciar la vitamina C. A diferencia de las bebidas energéticas industriales, esta alternativa no requiere grandes cantidades de azúcar añadida ni conservadores.
Además, quienes realizan actividad física moderada encuentran en esta mezcla una forma práctica de reponer líquidos y minerales sin recurrir a fórmulas costosas.
Cómo preparar loaded water en casa
Para comenzar solo se necesita un recipiente con agua, rebanadas de frutas y un suplemento en polvo sin azúcares añadidos. Tras reposar unos minutos en refrigeración, la mezcla adquiere un sabor agradable y cumple su función de hidratación.
Un punto clave es moderar la cantidad de electrolitos añadidos, ya que un exceso puede ser contraproducente.
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