La cepa probiótica bifidobacterium breve, en combinación con una dieta de calorías controladas, puede ayudar a los niños y adolescentes con obesidad a perder peso, según un estudio del Congreso Europeo de Endocrinología.
Los probióticos consisten en bacterias vivas y otros microorganismos «que están destinados a tener beneficios para la salud cuando se consumen o se aplican al cuerpo», y se pueden encontrar en el yogur, otros alimentos fermentados y suplementos dietéticos.
Según el Centro Nacional de Salud Complementaria e Integral de Estados Unidos, como los microorganismos presentes naturalmente en nuestro cuerpo, algunas bacterias de estos probióticos pueden ayudar a la digestión, la producción de vitaminas y la destrucción de células que causan enfermedades.