Los nutrientes que el suelo provee a las plantas también son vitales para la salud humana; estos elementos esenciales llegan a nuestra dieta a través de los vegetales (que los toman del suelo), o bien a través de productos animales que, a su vez, los adquieren de las plantas.
Catorce macro y micro elementos son vitales para el crecimiento de plantas y para la salud humana: entre los macronutrientes esenciales se encuentran nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio, azufre y ocho elementos llamados traza, entre ellos, cinco metales pesados (hierro, manganeso, zinc, cobre, molibdeno), así como tres no-metales (boro, cloro y níquel).
Por ello, los suelos que proveen un medio saludable son ricos en nutrientes que dan lugar a tejidos vegetales que contienen la mayoría de los elementos que el ser humano requiere.
La deficiencia de cualquiera de estos elementos se traduce en enfermedades en el cuerpo humano (Brevik y Burgess, 2014).
Por otro lado, los suelos constituyen una fuente imprescindible de medicamentos. Cerca de 78 por ciento de los agentes antibacterianos aprobados entre 1983 y 1994 y alrededor de 60 por ciento de las nuevas medicinas contra el cáncer, aprobadas entre 1983 y 1994, tuvieron sus orígenes en los suelos (Pepper et al., 2009).
Hoy en día, no todos los suelos pueden proveer estos minerales a los cultivos. Desde la revolución verde del siglo pasado, se ha considerado al suelo como un cuerpo inerte, al que solo bastaba incorporar fertilizantes para mantener su nivel de fertilidad y pesticidas para controlar las plagas. Voces críticas de entonces y evidencias actuales muestran que estos insumos han eliminado la microbiota del suelo, generando un desequilibrio biogeoquímico y destruyendo la estructura física del suelo.
La crisis del coronavirus covid-19 está mostrando nuestra vulnerabilidad como consecuencia de la destrucción de la naturaleza, del mal manejo de los suelos y de priorizar una agricultura industrializada. Para fortalecer nuestra salud debemos comenzar recuperando a los suelos, practicando una agricultura sustentable, ya que si no los conservamos, perderemos la capacidad de alimentarnos de manera sana.
*La doctora Helena Cotler Ávalos tiene el nombramiento de Profesora Investigadora Tecnólogo Titular “C” en el Área de Sistemas Socio-ecológicos del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial (CentroGeo).