El sueño de un África sin hambre puede parecer difícil de alcanzar, pero cuando los gobiernos y los asociados adoptan medidas audaces para hacer frente a las causas profundas de los conflictos, podría ser posible.
A fin de abordar la estrecha conexión entre el hambre y los conflictos, los Jefes de Estado y de Gobierno y los representantes de las organizaciones internacionales y regionales convocan una reunión paralela de alto nivel al margen de la 33ª Cumbre de la Unión Africana (UA). El acto, titulado «La colaboración para el mantenimiento de la paz mediante la mejora de la seguridad alimentaria y la nutrición en África», fue organizado conjuntamente por la República Democrática Federal de Etiopía, la Comisión de la Unión Africana y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
«La violencia hace descarrilar los logros alcanzados a lo largo de los años. Los conflictos desenfrenados y las crisis emergentes dictan que es imperativo ampliar nuestros esfuerzos para lograr y mantener la paz», destacó Josefa Leonel Correia Sacko, Comisionada de la Unión Africana para la Economía Rural y la Agricultura. El Comisionado añadió: «Para que podamos avanzar, necesitamos crear mecanismos más sólidos que vinculen la seguridad alimentaria y la nutrición con la paz y la seguridad. Tomemos nuestro destino en nuestras manos y creemos más oportunidades y economías robustas».
En consonancia con el tema de la Cumbre de la Unión Africana, «Silenciar las armas: crear condiciones propicias para el desarrollo de África», en el acto se examinó la importancia primordial de la seguridad alimentaria y la nutrición para el mantenimiento de la paz y la seguridad en África, y se lanzó la iniciativa «Hand in Hand» (mano a mano). En el acto también se presentó la publicación conjunta de la FAO, la Unión Africana y la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África (CEPA), el Panorama Regional de la Seguridad Alimentaria y la Nutrición en África 2019.
La paz y la seguridad alimentaria en África
Según las últimas cifras de la FAO basadas en el informe, casi 256 millones de personas en el continente africano sufren de una grave inseguridad alimentaria. El hambre va en aumento y el 20 por ciento de la población sufre de subnutrición.
Existe un vínculo innegable entre los conflictos y el hambre. Los medios de subsistencia de millones de hombres y mujeres en África dependen de la agricultura y la aparición de conflictos tiene consecuencias graves y que cambian la vida. Para las personas que dependen de la agricultura, los conflictos destruyen los sistemas alimentarios, diezman los cultivos y los recursos ganaderos y causan la pérdida de bienes e ingresos. Estos factores desencadenan la inseguridad alimentaria, la malnutrición y el hambre.
Además, las personas que viven en países afectados por conflictos tienen más probabilidades de sufrir inseguridad alimentaria y malnutrición. En algunos países africanos, la prevalencia de la subnutrición es aproximadamente dos veces y media más alta en los países afectados por una crisis prolongada que en otros contextos de desarrollo.
María Helena Semedo, Directora General Adjunta de la FAO, subrayó que los conflictos desencadenan un efecto dominó. Conducen a la inseguridad alimentaria y la malnutrición, que también son multiplicadores de conflictos, especialmente en los Estados frágiles. El ciclo implacable no tiene freno si no se actúa colectivamente».
Iniciativa «mano a mano» – para la paz y los medios de vida
Tanto el Programa de Desarrollo Sostenible de 2030 como el Programa 2063 dan prioridad firmemente a la transformación social y económica inclusiva y anclada en la paz. Para poner en práctica estas aspiraciones, la FAO lanzó la Iniciativa «mano a mano», cuyo objetivo es acelerar el progreso hacia la erradicación de la pobreza y el fin del hambre y la malnutrición.
La Iniciativa mano a mano de la FAO es una iniciativa basada en pruebas, dirigida y controlada por los países que da prioridad a los países en los que la capacidad nacional y el apoyo internacional son más limitados o en los que los problemas operacionales, como las crisis naturales o provocadas por el hombre, son mayores. Con sus herramientas más sofisticadas de modelización y análisis geoespacial, la iniciativa puede identificar las mayores oportunidades para aumentar los ingresos y reducir las desigualdades y vulnerabilidades de las poblaciones rurales, al tiempo que refleja las normas y estándares de las Naciones Unidas que hacen avanzar los tres pilares económicos, sociales y ambientales del desarrollo sostenible.
Semedo reflexionó: «Hand in Hand responde directamente al llamamiento del Secretario General de las Naciones Unidas en favor de un cambio transformador en el siglo XXI». Con el apoyo decisivo de la Unión Africana y de nuestros asociados, hagamos callar las armas trabajando mano a mano por la paz y el desarrollo».
En su declaración, Oumer Hussein, Ministro de Agricultura de Etiopía, complementó los esfuerzos de las asociaciones. «La paz es propicia para el desarrollo de África. La paz y el desarrollo están invariablemente interrelacionados y reforzaremos nuestras asociaciones para lograr el éxito».