Ciudad de México 21 de julio de 2021._ La UNAM publicó un estudio en el que detalla porque los hongos prometen ser la comida del futuro, y es que este recurso natural tiene una gran fuente de proteína y vitaminas, además de que son ricos en minerales, zinc, calcio y el selenio.
Hongos comestibles
En la época prehispánica, los hongos eran denominados nanácatl por su parecido en aspecto y sabor con la carne.
Además, eran bastante consumidos por los aztecas tanto en ceremonias rituales, para preparar alimentos y hasta por sus propiedades medicinales.
Actualmente en México, hay aproximadamente 300 especies diferentes de hongos comestibles, según información de la Secretaría del Bienestar; estos proliferan en bosques templados y la mejor época para recolectarlos es durante las lluvias, entre julio y septiembre.
Los estados que registran la mayor producción de hongos comestibles son el Estado de México, Puebla, Querétaro, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Puebla, Sonora y Veracruz.
La comida del futuro
Los hongos apuntan a ser la comida del futuro, debido a que tienen una enorme proporción de proteínas.
De acuerdo a la Maestra en Ciencias Elvira Aguirre Acosta, delegada de la Recopilación de Hongos del Herbario Nacional de México del Instituto de Biología de la UNAM, cada seta contiene alrededor de un 40% de materia seca, y de este porcentaje, un 20% son proteínas; por lo tanto el 60% restante es agua.